El fresco de mi ventana entra a la habitación,
caen las primeras gotas de una lluvia esplendorosa,
algunas gotas se cuelan, caen sobre tu cuerpo desnudo como una canción,
tengo sed de ti, gota a gota las beberé con expansión.
La luz de un viejo farol apenas si vislumbra la alcoba,
tu cuerpo frágil y desnudo a medio cubrir,
hacen que mis sentidos empiecen a encenderse,
como un volcán en erupción.
Mi mirada te recorre lentamente,
la yema de mis dedos empiezan a tocar tu piel,
despiertas de ese sueño profundo latente,
pero sin abrir los ojos te dejas llevar por la excitación.
Mis cinco sentidos empiezan a dislocarse,
te toco, tu piel quiero estremecerte,
te miro, tus sentidos se están volviendo locos,
te oigo, como gimes de placer,
te huelo, ese aroma de hombre,
y empiezo a degustarte palmo a palmo por tu piel.
Recorriendo tu piel con mis sentidos voy,
de norte a sur, esa es mi intensión,
la musa de tus sueños esta contigo hoy,
vuelveme loca con tu pasión.

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