Cara de ángel vestido de demonio,
galanura tersa en tu caminar,
buscando a la frágil presa,
para poderte saciar.
Encanto de hombre varonil,
me envolviste en las redes de tu gemir,
brazos musculosos que me atraparon,
sin poder ya escapar de ti.
Desnudaste mi alma con tus deseos,
te metiste en cada poro de mi sentir,
trasladaste tu cuerpo en mi cuerpo,
ya no supe mas de mi.
Besos y caricias penetraban en mi angustia,
de ser poseída por un demonio febril,
te saciaste de mi cuerpo entero,
haciéndome la mujer mas feliz.
Palpitaste, gemiste, susurraste,
te robaste la inocencia guardada,
satisfaciste tus deseos de hombre,
de esta mujer quien tanto te ama.
En mi cama en demonio te convertiste,
sacaste tus dones de enamorado,
no me importa verte como un demonio,
si al final eres mi ángel adorado.

0 comentarios:

Publicar un comentario